El Jimbee, sin premio en su estreno
El Jimbee Cartagena no obtiene premio en su primer encuentro liguero de la temporada 2022/23. Caía ante el Real Betis por 3-4, donde todos los tantos rojiblancos fueron firma de Lucâo.
En el inicio del partido se notó, y mucho, que también era el arranque de la temporada. Ambos equipos no arriesgaron y prefirieron tomar confianza desde la pelota a lanzarse a lo loco a por el contrario. Fueron minutos de tanteo, de esos que sirven para ir cogiendo calor.
El primero en dar el zarpazo fue el cuadro visitante, un Betis que se adelantó por mediación de Eric Pérez. Pero la reacción llegó a los pocos segundos. Lucâo, con un tremendo zapatazo, metió el cuero por la escuadra, poniendo las tablas en el marcador. Era el primer tanto del curso para un Jimbee que luego, poco a poco, se fue saliendo del encuentro. Corría el minuto siete.
En el nueve, Piqueras, con un latigazo de falta, volvía a poner por delante a los de Bruno García. Y en el 13, Raúl, casi sin ángulo, mandaba el 1-3 al electrónico.
Otra vez Lucâo acortó distancias, pero nuevamente el Betis golpeó a un Jimbee que no terminó de encontrarse cómodo en los primeros 20 minutos de partido. Aitor, a portería vacía tras un momento de desconcierto en el área, hacía más grande la brecha en el minuto 16. Era el 2-4, un resultado con el que se llegaría al descanso.
Ya en el segundo acto, el Betis salió a contener, ya que tenía el resultado a favor mientras los rojiblancos intentaban meterle un tijeretazo al marcador. En el 28, Duda optó por el portero-jugador, pero Sarmiento abortó las muchas ocasiones meloneras. Una de ellas, y bastante clara, un disparo de Lucâo a la escuadra. El portero argentino voló para evitar el tanto local.
Fue en el 34 cuando de nuevo el brasileño recogió un balón enviado por Jesús al segundo palo para hacer el tercero de la noche, tanto en su cuenta particular como en la del Jimbee. Fue, sin duda, el protagonista de la noche en las filas rojiblancas. Restaban seis minutos de infarto.
En los últimos compases, y con esa ventaja que otorga la figura del portero-jugador, el Jimbee buscó el empate. Pero no pudo ser. Nos quedamos cerca pero al final los tres puntos se marcharon a Sevilla.